
¡Ni madres! - dijimos ante la expectativa de estar mas de 3 horas bajo el sol. Así que enfilamos nuestros pies sobre Pino Suárez y entramos al museo de la Cd. de México y nos encontramos que, además de entrar gratis había buenas exposiciones altamente recomendables, hay una de fotoperiodismo 2007 en México, otra de arte urbano bastante interesante y una más de tarjetas postales mexicanas antiguas, algunas de ellas, de 100 años de antigüedad, bastante chingona la expo.
Pero también la semana santa incluyó la chingadera de que dejaron a no sé cuantos millones de personas sin agua durante tres días. futamadre. La última vez que me pude bañar fue el jueves en la mañana y ahí valió madres. Ya se imaginarán mi humilde hogar convertido en un chiquero con un cerro de platos sucios y secos apilados en el fregadero, el piso de la cocina pegajoso y el baño ya se imaginarán. Chingonamente, el agua regresó el sábado en la noche y pensé "va, el plan del domingo es limpiar a fondo la casa y luego bañarme deliciosamente", que ingenuo. Sí, limpié mi humilde hogar y al terminar, noté, con bastante emputamiento, que ya no tenía gas y mis hermanas tampoco tenían gas en sus depas, así que me la pelé y no me pude bañar. Ustedes dirán "ah, pero te podías bañar con agua fría", y lo pensé pero dije "¡Ni madres! después de tantos días sin bañarme, quiero hacerlo con agua calientita". Así que aguanté en mi jugo un día más. Chingonamente, hoy lunes en la mañana, mi Hermaña-la-de-enmedio ya tuvo gas en su depa.
Y para los que estaban preocupados, les adjunto foto de la bala que entró a mi humilde hogar y que mató, literalmente, la línea telefónica, pues pegó en la cajita de telmex que viene de la calle:
